miércoles, 17 de junio de 2009

F r i d a


Mujer de mirada profunda
que cargaste en tus espalda
sufrimiento y dolor.

Artista enamorada,
que postrada en una cama
en un lienzo al mundo
conmoviste con tu inspiración.

Mujer de varios ayeres
y en cada uno un retrato

de lo que en ellos vivió.

La dureza de tus cuadros,
y la ternura de tus cartas
cuando hablas del amor.

Señora Frida Kalho,
que a este mundo de arte
e inspiración has inundado.

Las dos Fridas uno de tantos,
y Diego tu gran pasión,
tus pinturas coloridos trazos
que adornan recintos
como el de la casa azul.

Tu ausencia mi alma entristece
y mis versos quiebra,
cuando la musa ausente se encuentra,
divagando solamente en autorretratos
que con tinta indeleble de sus ojos
para el mundo pinto.

Mujer eterna que de herencia
nos a dejado esa su arte,
hecha de amor y dolor.






sábado, 13 de junio de 2009

No preguntes.

No preguntes si eres bonita,
cuando vives en mi mente,
si te veo en la flor, en las estrellas
y en la luna que cada noche me acompaña.
No preguntes si te quiero,
cuando vivir sin ti no puedo,
si el día sea hace eterno
y las noches son de insomnio
por la angustia que siento
si supiera que te pierdo.
No me pidas definir mis sentimientos
púes la pluma esta agotada y el papel se me acabo
en los mil poemas que por ti eh escrito.
No me pidas no quererte
es imposible decírselo a mi corazón,
cuando solo por eso esta vivo.

jueves, 11 de junio de 2009

Nos besamos



Nos besamos aquella tarde,
y ni la luna lo esperaba
cuando vio que te abrazaba
y comenzó a caer la noche
acompañada de tu falda.

Nos besamos aquella tarde,
y después te dije que te quiero
gritándolo con gran alarde,
que te has vuelto como un sueño,
sueño hecho realidad que espero sea eterno.

Nos besamos aquella tarde,
y no se que decirte ahora,
gracias o un beso en la boca
y perderme en esa loca
miel que tu ser me sabe dar.

Nos besamos aquella tarde,
y hoy sin ti no vivo
tengo tantas ganas de amarte
contigo me siento un divo,
nos besamos aquella tarde,
y hoy de eso vivo cautivo.





Nada




Todo es igual, perfecto como siempre,
entro a la habitación y se encuentra
un poco fría, aunque el lugar es el mismo,
en la mesa un jarrón con un par de rosas,
aunque esta vez ya están secas,
en el tocador hay un poema que escribí,
la diferencia es que esta vez no lo leíste
hay un gran amor en mi pecho
que esta vez a salido por la ventana
y se a perdido en el vació de la nada,
esta vez estas solamente matándome
con tu sonrisa que conservo en una fotografía,
mis acompañantes son la soledad
y un reloj que me recuerda los minutos
que llevo ya sin ti, burlándose así
de la ironía de lo que hoy llamo vivir.